lunes, 12 de octubre de 2009

EL VIAJE: una experiencia singular. Un nuevo modo de aprender.


Y…al fin pudimos concretar el viaje con las alumnas estudiantes de las carreras de Inicial y de Primaria a la ciudad de Rosario. El primer lugar para concretar nuestra visita fue la GRANJA DE LA INFANCIA donde nos pusimos en contacto con la naturaleza y nos dispusimos a poner en juego nuestros sentidos poniéndolos a escuchar los sonidos de la naturaleza, los olores, los colores, las formas… A través de los aromas y los perfumes nos trasladamos a otras experiencias de nuestra propia infancia, de nuestros afectos, de momentos que necesariamente nos trasladamos a partir de percibir esos olores en contacto con las plantas, con el jardín, con la huerta. Los animales de la granja nos sirvieron de pretexto para observar y jugar, agudizar nuestra capacidad de mirar, de imaginar y de compartir con otros, así como descubrir algunos detalles de los animales. El próximo destino fue el JARDIN DE LA INFANCIA, allí nos adentramos a un paseo por la imaginación y en el tiempo. El Renacimiento con Miguel Angel y sus pinturas, sus descubrimientos producto de su gran capacidad de imaginar, de jugar y permitirse imaginar para así descubrir aquello que hoy nos parece un sueño, pero que justamente en este paseo te invitan a ser capaz de soñar y de imaginar cómo nos podemos involucrar con otros sueños apropiándonos de aquello que cada uno siente, o que quiere soñar…Y para ello no hay nada mejor que tocar, experimentar, trepar, correr, en definitiva, jugar, esta es la propuesta de este lugar. Nos dispusimos a experimentar con cada propuesta que nos hacen, y dejar que nuestros cuerpos se desplieguen en esta experiencia. Fuimos autoras de nuestras propias obras de arte…Además nos introducimos en un laberinto mágico de sonidos donde los ritos de los dioses nos guiaron hasta el final y nos llevaron a pensar nuestros deseos y ser capaces de confiar que apelando a los dioses podemos cumplir con los mismos. El almuerzo nos encontró en el mismo Parque de la Independencia, fue un momento de intercambio, de compartir y de tomar un respiro antes de continuar con nuestro recorrido. Otra nueva experiencia nos esperaba en el MUSEO DE LA MEMORIA, el lugar nos llamó la atención por las sugerentes palabras que se ubican en la fachada del mismo. Se pueden ver palabras como: vivir, deseo, liberar, expresar, comunicar, sentir, compartir, y otras…Entramos y muy cálidamente nos reciben las personas que nos guían en el recorrido, nos orientan para que de modo libre, cada uno se acerque a los paneles que muestran los rastros de nuestra historia reciente, nuestra historia de la dictadura y de los hechos de diciembre de 2001, nos encontramos con algunas imágenes, palabras, frases, nombres de personas, que no conocíamos o que teníamos alguna idea imprecisa sobre su participación en nuestra historia reciente. Luego del recorrido que cada una libremente hizo de toda la muestra, nos sentamos en el suelo a charlar y poner en común nuestras impresiones, nuestras dudas, nuestros pensamientos, algunas pudimos decir algo, otras escucharon y quizás se quedaron con ganas de poner en palabras lo que a veces no es tan fácil hacer, porque se trata de poner en juego las emociones y ponerlas en movimiento con algunos hechos históricos que pareciera que todavía aún, a sabiendas que nadie puede restar credibilidad a ellos, estamos todavía necesitados de construir esta memoria de nuestra historia, que como futuras docentes seguramente seremos las principales responsables de realizar el hecho de la transmisión. Fue muy movilizador, y es como que nos puso en un lugar de pensadoras de la realidad, de defensoras de un modo de vivir, que es justamente la democracia. Sólo en democracia podremos construir un lugar para jugar libremente, un lugar para imaginar un mundo que pueda ser el que yo deseo. Nos llamó la atención la historia de Pocho Leprati, un maestro que enseñaba a vivir mejor a sus alumnos y que por luchar por este ideal, fue injustamente muerto en los hechos violentos de diciembre de 2001. Nuevamente en colectivo y nuestro destino ahora es la ISLA DE LOS INVENTOS, o la fábrica de los sueños, aquí descubrimos modos diferentes de jugar con el hacer, fabricando objetos, manipulando, utilizando objetos que se reciclan, además de conocer un lugar que justamente está teñido de una historia, es la historia de los ferrocarriles, porque el espacio donde se instala esta experiencia es una vieja estación de ferrocarriles, y respetando las huellas de esta historia, se recicla para darle un sentido que supone dar lugar a otros sentidos, a otros sueños. El lugar estaba poblado de niños de diferentes edades que interactuaban con las diferentes propuestas, nosotros nos aventuramos a meternos en un lugar que se llama el Espacio Infinito, allí nos encontramos con los sonidos de la creación, con las luces de las estrellas y también con la música de las canciones de cuna y sentimos que nos trasladamos a nuestra propia infancia y nos transformamos…El tiempo, la magia, las transformaciones, sentir, pensar, experimentar, todo esto que nos estaba pasando. El regreso, nos encontró entre el cansancio y cierta sensación de que cada una tenía algo para pensar, para contar, para compartir…es que de eso se trata, de que cada una pueda apropiarse de “algo” que nos dejó esta experiencia…

Por prof. Mónica Muchiut
Jefa sección Educ. Inicial.
9/10/09


1 comentario:

  1. Buenísima la idea de conocer estos lugares. Imagino que ayuda a que los alumnos salgan de lo cotidiano y sepan utilizar este viaje como una forma de mejorar su próxima práctica cotidiana. Felicitaciones!

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